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Javi Hernández firma un hat-trick de oro en un 3–3 que sabe a poco

Los de Vivar Dorado dominaron, golpearon y mostraron una ambición que mereció un premio mayor. El 3–3 final, pese al esfuerzo y el hat-trick de Javi Hernández, dejó la amarga sensación de una victoria perdida.

 |  Alcala  |  Primer equipo

Los de Vivar Dorado dominaron, golpearon y mostraron una ambición que mereció un premio mayor. El 3–3 final, pese al esfuerzo y el hat-trick de Javi Hernández, dejó la amarga sensación de una victoria perdida.

En el césped del Diego Quiles, allí donde solo sobreviven los equipos con carácter, la RSD Alcalá de Vivar Dorado firmó una de esas actuaciones que quedan grabadas en la memoria, aunque el marcador final, un 3–3 trepidante, dejó la inevitable sensación de que se escapó una victoria que ya acariciábamos con los dedos.

Desde el primer pitido, los alcalainos demostraron que habían viajado a Elche para gobernar el partido. La presión era alta, las líneas verticales y las ideas clarísimas. En los primeros compases comenzaron a sucederse las llegadas: Nico Sánchez, eléctrico por banda, ganó línea de fondo y sirvió un balón raso que cruzó el área pequeña sin que nadie pudiera empujarlo. Era el primer aviso de un Alcalá que mordía.

Las ocasiones se encadenaban una tras otra hasta que, por fin, llegó el momento que todos presagiaban:
Javi Hernández, nuestro pichichi, asumió una falta directa y la ejecutó con precisión quirúrgica. El balón se enroscó, voló y se clavó en la escuadra como una flecha roja y azul. Un golazo para abrir el marcador y para recordar.

Y apenas unos minutos después, la historia se repitió con distinto guion: Nico robó, aceleró hacia la línea de fondo y puso un centro perfecto para que Javi Hernández, con instinto depredador, firmara su doblete. 0–2, el Alcalá era dueño del choque.

Antes del descanso, el Illicitano logró recortar distancias con un tanto que dejaba el duelo 1–2, pero ni ese golpe consiguió frenar la ambición rojilla.

La segunda parte no cambió el paisaje: el Alcalá salió otra vez con intensidad y valentía. Borja Sánchez pudo ampliar la ventaja en un mano a mano que salió rozando el poste. Pero el tercero no tardó en llegar. ¿Y quién, si no?
De nuevo Javi Hernández, implacable, cazó otro balón y firmó su hat-trick para poner el 1–3. Una actuación sublime, de delantero total.

Sin embargo, el fútbol tiene esas curvas inesperadas. El Illicitano, empujado por su público, acortó distancias con su segundo tanto y, en una jugada aislada pocos minutos después, encontró el 3–3 que acabaría siendo definitivo.

El empate sabe a poco. El Alcalá tuvo el partido en su mano, lo dominó, lo interpretó y lo golpeó con talento. El equipo mostró identidad, coraje y pegada. A veces el resultado no refleja la grandeza del esfuerzo, pero lo que sí dejó este duelo es una certeza: este Alcalá tiene alma de aspirante, fútbol para creer y un vestuario que no se rinde jamás.

Los chicos de Vivar Dorado ya piensan en la próxima batalla. Este punto, aunque corto, será gasolina. Porque jugando así las victorias volverán a caer de nuestro lado.

FICHA TÉCNICA

RSD Alcalá: Pantoja; Dani Marín (Salinas, 88’), Javi Jiménez, Arribas (Izan, 60’), Sergio Marcos (Cheki, 60’), Javi Hernández (David López , 81’), Aitor G., Nico Sánchez, Edu Viaña, Borja Sánchez (Héctor, 88’) y Dani Nieto.

Elche Ilicitano: Owen Bosch; Morales, Salvador, Ismael Muñoz, Martínez Bastida (Ballesteros, 55’), José Nicolás González (Sciancalepore, 45’), Adam Boayar, Houary (Martín Marrero, 88’), Guido Fernández, Imadiyi (Konare, 67’) y David Delgado.

Árbitro: Ángel Manso Rojas Comité  castellano-leonés, amonestó a Dani Marín, Borja Sánchez, Recio, Pantoja, Dani Nieto, Edu Viaña y Héctor Martínez por la RSD Alcalá; y a Sciancalepore, Houary, Konare y Martín Marrero por el Elche Ilicitano.

Escrito por: Ainhoa Riofrío